Las semillas con el gen resistente al poderoso y cuestionado herbicida no pueden ingresar al país y su siembra es ilegal. La única simiente legal es con rótulo oficial del Inase. Quienes siembren estas semillas serían denunciados penalmente por las autoridades sanitarias ya que su siembra es ilegal en Argentina y se trata de un delito federal.
Todo esto es muy importante para San Juan, que se ha caracterizado por la calidad de alfalfa tanto en forrajes como para la producción de semillas. Este prestigio se pone en riesgo si proliferase la siembra de semillas de alfalfas del tipo RR-RL Roundup Ready (resistentes al glifosato y reducidas en lignina), es decir alfalfas transgénicas.
Las RR son alfalfas modificadas genéticamente para que resistan al glifosato. El glifosato es utilizado en el campo para combatir malezas y "es un "biocida" poderoso que daña organismos beneficiosos del suelo, alterando el equilibrio natural y reduciendo la resistencia de los cultivos provocando enfermedades que devastan los cultivos de maíz, soja y trigo entre otros; y dan origen a un nuevo patógeno asociado en animales con envejecimiento prematuro e infertilidad. La evidencia parece real de que cultivos genéticamente modificados han perdido su resistencia genética a enfermedades que nunca constituyeron amenazas.
Existe evidencia de que el nuevo patógeno está asociado a un aumento de la infertilidad humana y probablemente tiene efectos adversos en la salud de los que aún no nos han informado. Como el flúor, el glifosato puede entrar en nuestra dieta de diversas maneras.
El servicio de extensión de Purdue University de Estados Unidos ha indicado que plantas fumigadas con glifosato u otros herbicidas son más susceptibles a numerosos desórdenes biológicos y fisiológicos y mantiene su recomendación de un "uso juicioso de glifosato para el control de malas hierbas". Sin embargo, uno de los puntos es que las malezas están desarrollando resistencia al Roundup. El uso ha ido más allá del nivel "juicioso" y a medida que el glifosato se acumula en el suelo, sus efectos adversos aumentan.
La recomendación para San Juan
No hay ningún transgénico en alfalfa que haya sido autorizado en Argentina. Esto sí ha sucedido en soja, maíz o algodón, pero no en alfalfa. En consecuencia, la utilización de estos materiales es ilegal y está sujeta a las sanciones de variado tipo y gravedad que corresponden por violar las normas vigentes.
El desarrollo de alfalfas RR fue llevado a cabo por una empresa privada, que es la dueña exclusiva de la licencia para multiplicar y comercializar estas variedades en todo el mundo. Estas alfalfas fueron lanzadas hace unos años en Estados Unidos.
La mayoría de los países que compran alfalfa no admiten la importación de alfalfa con OMG (Organismo genéticamente modificado, en las cuales estaría la alfalfa RR).
Otra consecuencia nefasta del uso ilegal e incorrecto de las alfalfas RR sería para la exportación de heno. Esta industria está creciendo en los últimos años a un ritmo muy interesante. En el mundo hay una demanda insatisfecha de heno de alfalfa y los países tradicionalmente productores (Estados Unidos principalmente, y en menor medida Australia, España, Canadá, Italia y otros) no pueden abastecer físicamente esas necesidades. Esto implica muy interesantes perspectivas para las exportaciones argentinas. Pero se debe tener en cuenta que los países consumidores, además de parámetros mínimos de calidad (proteína, fibra, humedad, etc.) exigen que el heno esté libre de materiales transgénicos. Por lo tanto, si se difundieran estas alfalfas RR ilegales y las plantas procesadoras de heno las incluyeran (con o sin conocimiento) en sus exportaciones (sean megafardos, cubos o pellets), se podrían generar sanciones económicas al país, además del cierre de mercados y la evidente pérdida de prestigio nacional. Revertir esa situación puede llevar años. Se aclara que la detección de los insertos transgénicos se realiza fácilmente por técnicas moleculares y que sus resultados son inequívocos e inapelables.
San Juan empezó este año a exportar a Chile alfalfa pelletizada y muchos productores han comenzado a preparar sus tierras para vender a este mercado que se cerraría si se siembran estas semillas prohibidas.
China cerró el mercado a exportadores de Estados Unidos y coloco a varios exportadores en la lista negra debido a la presencia de OMG en el cultivo.
El descubrimiento de la alfalfa Roundup Ready en las exportaciones mundiales de heno debe estar en el radar de los agricultores canadienses, dice Ed Shaw, un exportador de alfalfa canadiense. Shaw, que exporta el forraje en todo el mundo, incluyendo a China, dijo que tres exportadores de alfalfa estadounidenses han sido incluidos en la lista negra de la exportación de heno a China, y cientos de cargas de contenedores de heno han sido rechazados después de que se descubriera que contienen la alfalfa Roundup Ready en las cargas. "En el mercado de exportación, el elemento del tema chino está muy firme. Los chinos tienen tolerancia cero para los OMG", dijo Shaw durante una discusión acerca de la introducción de la alfalfa Roundup Ready en Canadá en una conferencia de forraje reciente.
El productor debe cerciorarse que la semilla que utilice provenga de un establecimiento habilitado por el Instituto Nacional de Semillas (Inase). Todas las semillas deben estar identificadas en su bolsa. Nunca debe comprar semillas en bolsas blancas (sin ningún tipo de inscripción).
Aca no sólo se está jugando la posibilidad de comercializar fuera de Argentina, sino también el riesgo de no saber qué efectos podrían causar en los cultivos y los suelos. Además de las causas penales que deberían enfrentar quienes comentan este delito.
Intervenciones: Inase, Senasa y Conabia
El Inase está haciendo una intensa campaña con inspecciones y reuniones con productores. Junto con el Senasa y Conabia son organismos nacionales que están dedicados a velar y regular la actividad. El primero al detectarse la presencia o sospecha de potreros ilegales, muestrean en conjunto con el Senasa para detectar y comparar el gen (el gen original pertenece a una firma americana) y de confirmarse que se trata del mismo gen, Senasa instrumenta la destrucción de los potreros e inhabilitación de su uso por varios años. De manera simultánea ambos organismos accionan penalmente en la justicia federal contra quien siembre, reproduzca la plantación y el propietario de la tierra por ser responsable solidario.
La mejor manera de cuidar la calidad de nuestras alfalfas que se distinguen a nivel mundial, es estar atento a este tipo de apariciones. No permitir que se siembren cerca de los potreros bien hechos, ya que por el viento o traslados ocasionales de la semillas pueden contaminarse. Ante la presencia de este cultivo denuncie de manera anónima indicando la ubicación de los potreros en cuestión.
Claves:
San Juan cuenta con 1.200 ha implantadas con alfalfa de las cuales 350 son dedicadas a producir semillas (registradas).
Plantar semillas RR es ilegal y es un delito federal. Los dueños de las plantaciones son pasibles de causas penales.
Los potreros son destruidos e inhabilitados para utilizarse por años. Por todo lo anterior, se recomienda expresamente a los productores no prestarse a este tipo de actividades, que además de ilegales, pueden perjudicar grandemente las exportaciones del país. En este contexto, se alienta la colaboración con entidades como Inase (Instituto Nacional de Semillas / www.inase.gov.ar), Senasa (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria / www.senasa.gov.ar) y Conabia (Comisión Nacional Asesora de Biotecnlogía Agropecuaria / www.minagri.gob.ar), que velan por la seguridad alimentaria y el comercio legal de semillas. Si se tuviera conocimiento de alguna actividad relacionada con el uso de alfalfa RR, se solicita la pertinente e inmediata denuncia ante los organismos arriba mencionados, a fin de impedir este tipo de práctica desleal y fuera de la ley.
(diariodecuyo.com.ar)
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